lunes, 27 de septiembre de 2010

Impuestos para todos

Esta semana, en la que el Gobierno se ha asegurado el apoyo a los Presupuestos Generales del Estado para 2011, se ha conocido la ya anunciada subida de impuestos a “los que más tienen”. Ahora ya no les llaman ricos. De momento se habla de introducir en el IRPF un nuevo tramo con un tipo del 45 o el 47 por cien para las rentas de más de 120.000,00 euros.

Esto es únicamente una medida de cara a la galería. La recaudación extra que con esta subida se obtendrá será tan baja que no solventará el problema del déficit público en el que nos han metido. Este solo se reduciría poniendo coto al desmedido e inútil gasto de las Administraciones públicas, y no precisamente al de inversión en infraestructuras que es ahora más necesario que nunca. Eso sí a lo mejor granjea algún que otro slogan electoral algún voto.

Según datos de la Memoria Tributaria de 2008 publicada por el Ministerio de Economía y Hacienda recientemente, el 89,2% de los que pagaron IRPF del ejercicio 2007 ganaron menos de 36.000,00 euros, de los que el 60% ganaron menos de 15.000,00 euros. Solo un 0,5% declaró más de 120.000,00 euros. El autentico problema fiscal es que somos un país de pobres.

Además también se observa que entre los pocos contribuyentes con rentas superiores a 30.000,00 euros más del 50% de las mismas proviene de su trabajo. Es decir que cuando se sube la renta, aunque sea en los tramos más altos, a los que se está gravando son a los asalariados más cualificados, que son los que más ganan. Ello lleva a la desmotivación de esos trabajadores más cualificados y su posible “huida” a países donde sean mejor tratados fiscalmente, ya que son los que más fácilmente serán contratados en el extranjero, y donde además probablemente sean tenidos en mejor consideración.

La consecuencia de esta desmotivación, la reducción de la productividad, uno de los grandes problemas de nuestra economía, lo que nos perjudica a todos. Ya que normalmente es precisamente el trabajo de los trabajadores más cualificados el más rentable para sus empresas. Por eso se les paga más.

En lugar de subir impuestos se han de aplicar medidas que hagan que haya más gente que gane más dinero, para que aun pagando a unos tipos impositivos iguales o más bajos, seamos optimistas por un momento, el Estado recaude igual o más.

(Articulo publicado en el especial de empresa del Periódico Mediterráneo del día 26 de septiembre de 2010)

viernes, 24 de septiembre de 2010

Viva la Tasa Tobin!!!

Pensar en aquello de que tenemos los políticos que nos merecemos me pone a temblar cada vez que el Presidente del Gobierno habla de Economía o Impuestos. La última ha sido apoyar la propuesta francesa de la instauración de la Tasa Tobin, y no en cualquier sitio, si no nada más y nada menos que en la asamblea general de la ONU.

La tasa de marras no es más que un impuesto, llamemos a las cosas por su nombre, sobre las operaciones financieras internacionales que aparece en boca de populistas en cada crisis económica. El discurso se vende fácil por aquello de que se impondría a los bancos. Lo cierto es que dicho impuesto es en la actualidad imposible de instaurar ya que exigiría una gran coordinación entre países para conocer qué operaciones debieran gravarse, quien las pagaría y, lo mas importante, quien las recaudaría. Otra cosa seria que con esa excusa de alguna forma se subiera la tributación de las rentas del capital a nivel estrictamente nacional.

De momento ya tenemos aquí una subida del IRPF.